Evra Gart es el seudónimo de Grozavescu Mihai Gabriel, un poeta, abogado, exfiscal y estudiante de arte dramático, nacido en Rumania, Caransebeș en el condado de Caraș-Severin (1976). Fue miembro activo del círculo literario George Suru, en Caransebes, bajo la dirección del profesor y crítico literario Octavian Doclin, quien lo encaminó hacia la prosa; gracias a su influencia, Evra decide renunciar al derecho y entregarse a la literatura. Entre 2001-2003, se traslada a Valencia, España, y empieza estudios en literatura moderna española: V. Alejandro, Jiménez y, en especial, Miguel Hernández. En 2004 se traslada a Génova, Italia, donde conoce a Bruno Rombi, una de las voces más apreciadas de la poesía italiana contemporánea, quien se convierte en su mentor. Estudia a los poetas italianos modernos: S. Quasimodo, Ungaretti, E. Montale, pero también a los clásicos: Petrarca y Leopardi. Desde el 2014, vive y desarrolla sus actividades en Ulm, Alemania.
Trigal
escondiste las lágrimas
de la ceremonia de curación
la moneda falsa en las caras tristes
la mujer lloraba indefensa
más allá de la inmortalidad
—una vez fue un campo árido—
sobrevive y ahora llora
¡oh, quiero darte un hijo!
regalarte una voz
el niño todavía reposa en el útero
en los cien táleros de plata
¡cómo quisiera darte un bebé!
pero el bebé continúa en el útero
en la cara falsa de la moneda
¿y si te doy un bebé?
exclama el trigal
un hijo nuestro, renacido
del polvo, dirá otra vez
¡mamá!
oh, Señor, tú, creador de ausencia
dame un bebé que acaricie
mi rostro, mis costillas, mis ojos
que sea un trigal más allá
de la muerte
la madre yace
No sabrás — aún
no sabrás —aún
cómo aman los poetas
esa vieja canción
cómo se aman en las noches
cuando la luna calla
se desnuda de la primera nota
bajo la sombra de la inmensidad
del cielo
tampoco sabrás
cómo los poetas se unen al silencio
contemplan en el abismo
recuerdos de un lejano pasado
recordarías con sorpresa
quien dirige la gran orquesta
del amor
Algunas veces
a veces todo duele
la carne del alma
el ojo, el pelo, el diente
a veces duele el cielo en el cuerpo
me descompongo
en pequeñas partículas que
los genios llaman átomos o
en briznas de trigo
gérmenes que renacerán
a veces el otoño escribe letras
en lugar del alma —lamentos
por la llegada de quien me
llevará más lejos
y más lejos
a veces es imposible
levantarme de la silla
con las manos entre mis ojos
contemplo mi aullido:
¡qué hermoso sería el mundo
sin nuestro grito adentro!
***
todos los días me contempla la muerte
me contempla con sus grandes ojeras
ansía el lugar en los escenarios
desde donde observo el espectáculo de la vida
ayer, me persiguió como un ladrón
—mientras espero el pan—
. ¡vine a jugar un poco más!
. ¡no, gracias, no tengo tiempo para jugar!
en cada esquina, la muerte
me sonríe con malicia
refunfuña entre sollozos:
se acerca el tiempo
nos vemos, nos vemos
no te alejes de mí
no vayas lejos
Elegía
. para una amiga poeta
duerme, amiga mía, duerme
anhelo tu almizcle
seco es el corazón de quien
esconde las lágrimas en el escrito
duerme, amiga, duerme un poco más
duerme con estas palabras, contiguas
duerme, al menos, una noche y un día
duerme y recuérdame de la oscuridad
su gemido:
la poesía se enmarca en hilo dorado
las palabras se bordan en plata
no superes el espacio ni lo traspases
cuenta los pasos hacia la fuente —lejos—
duerme, amiga, descansa en los verbos
largo es el camino antes de ser
coronada con espigas de trigo
en lugar de con palabras

María Del Castillo Sucerquia (Barranquilla, Colombia 1997) es una poeta bilingüe, escritora, tutora, médica oriental (Neijing, España) y traductora (francés, inglés, italiano, portugués, griego, árabe, español y alemán). Colabora como traductora y columnista en las revistas Vive Afro (Colombia), Altazor (Chile), Cronopio (Colombia), El Golem (México), Cardenal (México), Poesía UC (Venezuela) y Revista Digital de Artistas (México).
Contacto: lacabramontes@outlook.com +57 301 4520375.