Ojos Vermelhos | Un pacto divino: Hounds of love de Kate Bush

Artista: Kate Bush.

Fecha de lanzamiento: 16 de septiembre de 1985.

Género(s): Art pop, pop progresivo, rock progresivo.

Sello discográfico: EMI.

Duración: 47:26 minutos.

El circuito de la cultura occidental en verdad que es curioso e impredecible. Puedo declarar que casi nadie pensaba que, a casi 40 años de su publicación, una canción y un disco pudiesen volver a estar en los puestos más altos de las listas de popularidad. Pero, gracias a la fuerza de la cuarta temporada de la serie estadounidense Stranger Things, un nuevo pacto divino se ha cumplido: la música de Kate Bush está más viva que nunca.

Kate Bush siempre ha sido una figura enigmática en la industria musical. Es una de las cantantes y compositoras más reservadas en nuestra parte del planeta. Su secrecía es tal que, en sus casi 50 años de carrera, solamente ha salido de gira dos veces, una en 1979 y otra en 2014. No obstante, además de su naturaleza misteriosa, también es verdad que su influencia en la música contemporánea es importantísima. Desde figuras como Björk o Grimes, hasta la propia música rap, todos han sido afectados de diferentes maneras por la obra de esta cantautora británica. Con esto en mente, reseñaré Hounds of Love, álbum que es considerado como el magnun opus de esta artista.

Este disco tiene una estructura bastante interesante, pues se divide en dos “lados”. La primera parte está compuesta por cinco canciones que se podrían catalogar en el ámbito más “pop”, pero, no por esto, menos interesantes. De hecho, la canción que abre el álbum de una manera increíble es, además, la canción más conocida de Bush. “Running Up That Hill (A Deal With God)” es una pieza de belleza inigualable, pues su atmósfera es única. Se trata de una balada que habla sobre la empatía y la urgencia de un mejor entendimiento entre las personas. Todo eso soportado por un inusual instrumento, el Fairlight CMI, que sería el predecesor directo del sampling, técnica esencial para el rap.

Y, hablando de sampleos, la siguiente canción, homónima al álbum, hace honor a esta práctica, extrapolando un diálogo de la película de terror La noche del demonio (1957), el cual hace referencia al tema principal de esta pieza: el temor al amor. Esta temática es ejemplificada en la barroca, pero dura, instrumentación de la canción, la cual termina por encantar al escucha.

“The Big Sky” continua esta racha de perfectas y explosivas composiciones pop con giros progresivos. De una temática más relajada, pues habla sobre los placeres más infantiles y simples que uno puede disfrutar en la vida, como lo es voltear al cielo y ver las nubes pasar. Si bien es un corte mucho más melódico y “tradicional”, la experimentación no cesa, pues las vocalizaciones de Bush terminan por ser casi abstractas.

La primera mitad de Hounds of Love culmina con un par de canciones excepcionales. La primera, “Mother Stands for Comfort”, es una balada que reflexiona sobre el amor materno y sus límites. Kate Bush, mediante una instrumentación casi industrial, cuenta la historia de un asesino que es protegido por su madre. Esta lúgubre escena es seguida por el segundo gran sencillo de este disco, “Cloudbusting”. En mi humilde opinión, este tema es igual o aun más esperanzador que “Running Up That Hill (A Deal With God)”. Inspirada en las memorias de Wilhem Reich, “Cloudbusting” narra la cercana relación de un padre y su hijo y, al mismo tiempo, es un llamado a la acción contra las injusticias del mundo. La instrumentación de esta pieza comienza con unas armoniosas cuerdas que, mientras la canción progresa, son acompañadas con redoble de tambores casi militar, lo cual la proporciona una fuerza y emotividad increíbles.

La segunda parte de este álbum es una suite integrada por 7 canciones, la cual lleva por nombre “The Ninth Wave”. Se trata de un viaje en donde Bush lleva al escucha de la muerte al renacimiento. Cabe destacar que este es el momento más experimental de Hounds of Love, pues la cantautora crea armonías tan delicadas y suaves como en “And Dream of Sheep” y “Under Ice”, las cuales son yuxtapuestas con los sonidos perturbadores de “Waking the Witch” o el interesante uso de cantos gregorianos en “Hello Earth”. En suma, la genialidad y el impacto de Kate Bush, ejemplificada no solo en este trabajo, sino en toda su discografía, son evidentes. Son ya 37 años desde que Hounds of Love fue originalmente publicado y es posible ver que la obra de esta cantautora británica no tiene vigencia. Es, por ende, un pacto divino que seguirá perdurando en la historia musical.


Enrique García Moreno (Ciudad de México, 1998). Estudiante de Lengua y Literaturas Modernas Portuguesas (Simón, existe) y de actuación. Melómano de profesión y cinéfilo de oficio. Escribe poesía vermelha y prosa. Ha concursado en varios concursos de relato como el Juan Rulfo o el Luis Arturo Ramos de la Universidad Veracruzana.

Un comentario Agrega el tuyo

  1. Annie dice:

    Hola, alguien me podría decir en que peli o serie se escucha Running up that hill antes de su ahora famosa aparición en Stranger Things?? Sé que la escuche en otra peli o serie y no recuerdo cual!!! Gracias!!!

    Me gusta

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s